Para pasar la foto a blanco y negro y después resaltar algunas partes de la imagen con su color original tenemos que seguir los siguientes pasos:
- En primer lugar, debemos abrir el editor de imágenes GIMP y abrir el archivo de una imagen (lo más colorida posible) que tendremos que descargar en el escritorio de nuestro ordenador anteriormente.
- Después debemos de pulsar las teclas "Ctrl+C" y luego pulsar las teclas "Ctrl+V", cuando hagamos estos pasos, veremos como nuestra imagen va a estar rodeada de una línea discontinua y en la parte derecha van a aparecer dos capas, la del archivo abierto y la que acabaríamos de pegar pulsando esas teclas.
- En la parte derecha, donde se encuentran las capas mencionadas anteriormente, hay que pulsar con el botón derecho del ratón la capa que acabaríamos de pegar y en las secciones que nos salgan, debemos pulsar o seleccionar la sección de "A una nueva capa".
- Después de haber seguido el paso anterior, en esa misma capa, debemos irnos a la parte de arriba y seleccionar la parte de "colores" y dentro de esta parte hay que elegir la sección de saturación y aquí dentro en la barra donde nos indica que saturación tiene nuestro archivo, debemos de rebajarla al mínimo y veremos como nuestra capa pegada se volverá en blanco y negro.
- Cuando tengamos la capa en blanco y negro, tenemos que ir al menú de herramientas y seleccionar el símbolo de la goma, en esta herramienta elegimos el grosor que deseemos que tenga nuestra goma y pasamos a borrar las partes en la capa de blanco y negro que queramos resaltar, y automáticamente cuando pasemos la goma por esta parte de la imagen volverá a tener el color original de la imagen colorida que hemos cambiado a blanco y negro mediante los procesos anteriormente explicados.
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